Como la canción de la colombiana Shakira, la LIX Legislatura presidida por María Concepción Herrera Martínez es ciega, muda y sordomuda ante la ciudadanía queretana.
Ante un centenar de ciudadanos, que pretendían entregar por escrito sus peticiones a los diputados, la mujer nacida en la Sierra ordenó cerrarles el paso.
Fue la fracción legislativa de Morena quien atendió a ese grupo ciudadano.
Concha Herrera Martínez se preocupó por el glamour pueblerino, más que por atender a los ciudadanos en el insulso informe legislativo.