Silvia Rivera Hernández, secretaria general del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA) Sección 32 Querétaro, acompañada de un grupo de trabajadores, piden a las autoridades estatales, concretamente al secretario Julio César Ramírez Argüello, respeto a las condiciones generales de trabajo.
«Todo mundo habla y la verdad es que los trabajadores de salud debemos ser escuchados. Estamos luchando ante la pandemia, que nadie estamos preparados, para sobrevivir la incertidumbre y el estrés, viendo que no es suficiente», denuncian.
«No somo héroes, somos igual de humanos como ustedes. La realidad es que un hospital, qué concentra a la mayoría de los pacientes, no en unas oficinas. La realidad es una cama, con una familia que está angustiado y un personal que está con las caras marcadas, pies marcados y sin dormir», explica uno de los del personal de salud.

Denuncian la falta de material médico y medicamentos para realizar de manera eficiente su trabajo. Además de la mala calidad de los insumos.
Denuncian que el hospital COVID-19 (Hospital General) ubicado en avenida 5 de Febrero, ha estado a punto de llenarse y el personal vive en continuo estrés.
Rechazan que esta rueda de prensa tenga la intención de presionar para remover al secretario Julio César Ramírez, sino que volteén a verlos y que los dejen desempeñar su labor.
Hacen la invitación para que el gobierno del estado de Querétaro es que miren a los trabajadores, a los pacientes. Que sean escuchados no solo por el gobierno, sino por los ciudadanos.
Igualmente el sindicato hace la invitación a los medios de comunicación de concientizar a los queretanos a que el virus existe y no relajar las medidas sanitarias.